Cuando desarrollamos circuitos impresos uno de los criterios más importantes es el DFT (Design For Testing) que nos permiten comprobar el comportamiento de nuestro diseño y además de ayudarnos a dilucidar los criterios de aceptabilidad para tal diseño. Un diseño que no sea sometido a un protocolo de aceptabilidad estará expuesto a posibles fallas ya sean involuntarias o fallas de fondo por causa del diseño.
En la actualidad existen protocolos muy fuertes para aceptabilidad de circuitos impresos que permiten hasta cierto punto garantizar un funcionamiento adecuado y aceptación para la interacción en aplicaciones complejas.